El portero de Real Madrid se encuentra en Bamako, capital de Malí, donde está viendo el trabajo de la ONG Plan y rodando un anuncio con los niños de Malí que saldrá en octubre.
Entrevista:
P: ¿Dónde se encuentra ahora?
Casillas: En Bamako rodando un anuncio que saldrá en octubre con la campaña de plan de los niños. He visto dónde y cómo viven, es duro, estamos acostumbrados a muchas cosas y aquí no hay nada. Con un llavero, un pin o un globo se vuelven locos, son los mas contentos del mundo.
P: ¿Es cierto que le han regalado una cabra?
Casillas: Es verdad, la comunidad me ha regalado una cabra, y yo, con cariño, le he puesto el nombre de Mahamadou Diarra (risas). Él no ha podido venir. Kanouté también lo intentó, pero no pudo.
P: ¿Qué es lo que más necesitan en Malí?
Casillas: El dinero mueve montañas. Hay una pobreza extrema y toda ayuda es poca.
P: ¿Es cierto que le llamaban galáctico Casillas?
Casillas: Sí, debe ser que se lo chivó algún entendido del fútbol. Lo curioso es que nadie sabe cómo es tu cara, así que en persona no te reconocen muchos.
P: ¿No siente un escalofrío viendo el gasto de 94 millones en Cristiano y en lo que se podría ayudar empleándolo aquí?
Casillas: Son temas distintos, una cosa es el fútbol y otra cosa la pobreza infantil. Yo puedo emplear la popularidad para hacer llegar el mensaje, concienciar con mi imagen a la gente, pero no hay que olvidar a la gente anónima que trabaja en esto y que está más involucrada.
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